Qué quesos puede comer una embarazada
Lista de contenidos
- Queso y embarazo
- Cómo comer el queso estando embarazada
- El queso tiene cierta parte leche cruda y otra parte leche pasteurizada ¿Qué hago?
- ¿Los fermentos lácticos también son bacterias dañinas?
- Tengo mucho tiempo el queso en la nevera ¿podría ser malo para el organismo?
- ¿Qué hacer con las comidas compuestas de queso ya preparadas que necesiten microondas o horno?
- El queso que he comprado es de leche pasteurizada, pero ha sido madurado con moho ¿qué hago?
- ¿Las tartas de queso son seguras en el embarazo?
- ¿Se puede comer la corteza del queso estando embarazada?
- En la etiqueta del queso no pone si es leche pasteurizada o cruda, ¿qué hago?
- Creo que he cometido un fallo y he comido el queso equivocado ¿qué hago?
Queso y Embarazo
En periodo de gestación, debemos procurar informarnos bien sobre los tipos de alimentos que podemos consumir ya que algunos alimentos se les atribuye serias para el feto en gestación. Ya sea por su composición y por sus propiedades nutricionales, el queso es uno de esos alimentos que se pueden consumir, pero debemos tener en cuenta que no podemos consumir todos los tipos.
No hay necesidad de prescindir completamente del queso. El queso también contribuye favorablemente al embarazo por sus valores nutricionales, solo debemos tener en cuenta una serie de procesos por los que ha pasado el queso y por el que no todos los médicos aceptan en la dieta durante un periodo de gestación.
Quesos que no se pueden comer en el embarazo
Efectivamente hay quesos de los cuales no nos podemos permitir su ingesta diaria y, si ya los comías de antes, tendrás que cambiar tu rutina alimenticia y comer otro tipo de quesos que si puede contribuir favorablemente a su embarazo.
De manera genérica, los quesos que no podrás tomar en el embarazo son todos aquellos que han sido elaborados con leche cruda. Quesos frescos con altos índices de humedad y con presencia o con posibilidad de tener moho.
¿Qué hace un queso peligroso para las embarazadas?
Un queso con alta humedad y de pasta blanda tiene más posibilidades de tener moho en su proceso de curación. Además que también contribuye al desarrollo de agentes bacterianos como la Listeria Monocytogenes (Listeriosis). Si un queso posee esta bacteria, es posible que se den casos de dolor muscular y fiebre que durante los tres primeros meses de embarazo. La embarazada puede transmitir la enfermedad por la placenta y causar la infección en el bebé provocando trastornos neurológicos y problemas psicomotrices al feto.
Por ello recalcamos que el mejor proceso para conseguir un “queso seguro” de comer es de leche pasteurizada.
- Leche pasteurizada: La fábrica ha sometido la leche a elevadas temperaturas, concretamente a unos 75º aproximadamente. Con este método se consigue descartar la proliferación de bacterias potencialmente peligrosas para el organismo. Luego se podrán añadir aditivos que mantengan el queso adecuadamente como son fermentos lácticos, pero esto es optativo.
- Leche cruda: La fábrica no aplica tratamiento a la leche, solo los aditivos necesarios para el correcto mantenimiento del queso. Con esto conseguimos un queso más “puro” ya que es el queso realizado de toda la vida y prosee propiedades que se hubieran perdido si la leche se hubiera pasteurizado. Ahora bien, poseen el riesgo de poseer más bacterias y por tanto no es aconsejable su ingesta en periodo de embarazo.
Quesos que sí se pueden comer en el embarazo
Recuerda que debemos ver bien la etiqueta de cada uno de los productos que podamos ingerir. Siempre es mejor consultar con el médico la dieta que debes seguir. Genéricamente, se recomienda que en el periodo de embarazo consumas queso con leche pasteurizada, ya que este tipo de leche permite que todas las bacterias potencialmente dañinas mueran en el proceso.
Olvídate de quesos frescos y semi-blando, esos quesos tienen porcentajes de humedad lo suficientemente elevados como para que el habite la bacteria ya mencionada. Es mejor declinarse por quesos más secos como son los semicurados o curados, y como no, de leche pasteurizada.
Como has podido comprobar, cuanta menos humedad mejor. Estos tipos de queso que mencionamos son para evitar posibles enfermedades. Es mejor prevenir los alimentos que puedan dañar la salud del feto, ya podrás comer cualquier tipo de queso cuando el bebé haya nacido.
Beneficios del queso para el embarazo
No te prives de los lácteos en tu dieta alimenticia. Estos lácteos te darán el aporte de calcio que tanto necesitas y que darán a tus huesos la resistencia que tanto necesitan en tu movilidad diaria. Además, el calcio también es bueno para el feto, ayuda a su formación y te ayudará con múltiples rutinas del día a día.
El nutriente principal de cualquier lácteo es el calcio, pero también podemos ver en el queso otros nutrientes que pueden ayudarte con el embarazo. Además de ser fuente de calcio, vitaminas y proteínas, el queso también contiene otras propiedades como:
- Ácido fólico que ayuda al correcto desarrollo neurológico del feto en su formación.
- Zinc para la creación de anticuerpos y fomenta el crecimiento del bebé.
- Fósforo para reforzar el sistema inmunitario además de contribuir favorablemente en el futuro al desarrollo de dientes y uñas.
- Vitaminas A y D para la contribución de glóbulos rojos y obtener agudeza visual.
Lista de queso a consumir en el embarazo
Más adelante daremos más detalles de cada uno de los quesos de la lista, pero para hacerlo más visual, aquí tienes un listado resumen de los quesos que sí y no puedes comer en el embarazo.
Queso que SÍ puedes comer | Queso que NO puedes comer |
Quesos secos (semis o curados) | Quesos blandos o semi-blandos |
Queso Mozzarella | Queso crema blando |
Queso Gouda | Queso Feta |
Queso Edam | Queso de Cabra |
Queso fresco francés | Queso Brie |
Queso para untar | Queso Camembert |
Queso Ricotta | Queso Azul |
Queso Mascarpone | Queso Stilton |
Queso Parmesano | Queso Roquefort |
Queso Provolone | Queso Gorgonzola |
Queso de Burgos |
Tras examinar la lista, estamos viendo que también hay quesos blandos en la columna en la que sí puedes comer. Esto se debe a que hacemos referencia a los quesos que han sido elaborados con leche pasteurizada. Siempre debemos ir buscando el queso cuya etiqueta refleje la leche pasteurizada. En caso de que no nos ponga nada, es mejor desconfiar y coger otra opción.
Cómo comer el queso estando embarazada
El queso es leche, cuajo y sal y punto. Pero también es cierto que en la industria alimentaria también hay ciertos compuestos añadidos que nos hacen dudar cuando vemos una etiqueta. Vamos a tratar de especificar un poco más.
Muchos de los quesos que se han puesto en el punto anterior como NO recomendados es porque la mayoría son blandos o suelen elaborarse con leche cruda. Pero como en todas las industrias, también existen variantes para cada queso. Hay pocos fabricantes “grandes” que solo hagan un tipo de queso. El queso de Burgos por ejemplo, que aunque NO esté recomendado para su ingesta en el embarazo, también puede haber variantes como su preparación en leche pasteurizada y así no habrá ningún peligro.
Recalcamos que en la etiqueta debe poner que ha sido fabricado con leche pasteurizada, sin embargo también encontramos preparados como el queso en lonchas, rallado, etc. Por ejemplo a la hora de comernos una buena pizza, no se especifica bien el tipo de queso que tiene, por lo que tenemos incertidumbre. En caso de que no lo tengamos claro, preguntar al vendedor.
El queso tiene cierta parte leche cruda y otra parte leche pasteurizada ¿Qué hago?
Mejor descartar ese queso, debe poner que está hecho exclusivamente de leche pasteurizada. Aun así, existen pocos tipos de queso que sigan esa fórmula, puedes reemplazarlo fácilmente comprando otro tipo de queso que puedas probar y si te convence te lo llevas. Eso sí, 100% leche pasteurizada.
¿Los fermentos lácticos también son bacterias dañinas?
No, los fermentos lácticos poseen una función positiva en tu organismo y no son baterías dañinas ya que su principal función es la del mantenimiento del queso. Claramente, cuanto más natural mejor, pero no hay de qué preocuparse ya que el proceso de pasteurización está para eso, para eliminar las bacterias que puedan causar daño en nuestro cuerpo.
Tengo mucho tiempo el queso en la nevera ¿podría ser malo para el organismo?
Como con todos los alimentos, puedes ver que si hace mucho que no lo comes, se puede ver seco o incluso con moho. Si el queso se ha conservado favorablemente, no hay de qué preocuparse. Recuerda que no debe estar en contacto directo con otros alimentos y lo mejor es dejar una bandeja con solo lácteos.
¿Qué hacer con las comidas compuestas de queso ya preparadas que necesiten microondas o horno?
Repito la importancia de tener en cuenta si nos pone su elaboración con leche pasteurizada. Es posible que pienses que como es un alimento que va a recibir calor (superior a 75º) pues todas las baterías morirán en el proceso. Pero lo cierto es que esto no lo podemos garantizar nunca con fiabilidad ya que por fuera puede verse cocinado o gratinado, pero por dentro puede estar crudo. Consulta con el vendedor o con tu médico.
El queso que he comprado es de leche pasteurizada, pero ha sido madurado con moho ¿qué hago?
Estos quesos a pesar de que han sido elaborados con leche pasteurizada, se han conservado en un ambiente húmedo como una cueva y ahí se han generado moho. Nuestra recomendación es evitarlos, pero también puedes cocinarlo con la suficiente temperatura para descartar posibles amenazas. Trata de limpiar el moho y procura una buena conservación.
¿Las tartas de queso son seguras en el embarazo?
En principio utiliza solo leche pasteurizada para cualquier tipo de cocinado o repostería que hagas. Si vas a hacer tarta de queso trata de calentarla lo suficiente como para que pueda eliminar este tipo de bacterias. Disfruta de la repostería al horno sin problema. Recuerda que lo mismo puede pasar con el arroz con leche, pizzas, etc. Asegúrate de que la comida haya cogido la temperatura adecuada para matar la bacteria.
¿Se puede comer la corteza del queso estando embarazada?
Preferiblemente no. En verdad no pasaría nada si se tratara de quesos blandos o tiernos ya que la misma corteza es natural y forma parte del queso, sin embargo dependiendo del queso, fábrica y tratamientos, la corteza puede poseer parafinas y otros compuestos para mejorar el mantenimiento del queso. Ante la duda, es mejor no comer las cortezas.
En la etiqueta del queso no pone si es leche pasteurizada o cruda, ¿qué hago?
Ante la duda, tenemos que preguntar al vendedor. Existen alimentos que en su mayoría se fabrican exclusivamente con leche pasteurizada como es el queso en lonchas. También nos podemos encontrar con alimentos que en su composición tengan queso y no se especifique el tipo de queso como por ejemplo las pizzas. Es mejor buscar más información en la etiqueta, preguntar a nuestro médico o vendedor. Recuerda que siempre y cuando el queso sea cocinado y calentado a una temperatura superior a 75º, minimizamos el riesgo.
Creo que he cometido un fallo y he comido el queso equivocado ¿qué hago?
Debes ponerte en contacto con tu médico, matrona o ginecólogo para comunicar tus acciones y hacerte seguimiento por si tuvieras síntomas. Recuerda que este artículo te asesora sobre un tema genérico e inexacto, pero ante dudas muy puntuales, lo mejor es la ayuda de un profesional. No podemos asegurar los días exactos en lo que puedes percibir síntomas, pero con un seguimiento y los controles de embarazo normales, puedes despreocuparte ante cualquier posible daño. Eso sí, recuerda el fallo cometido y trata de rectificar la próxima vez.