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Tipos de queso según la leche: vaca, cabra y oveja

El queso es un alimento versátil y delicioso que se puede encontrar en una amplia variedad de tipos y sabores. Una de las formas más comunes de clasificar los quesos es según el tipo de leche utilizada en su elaboración. Los quesos pueden ser de leche de vaca, cabra u oveja, o incluso una mezcla de estas leches. En este artículo te explicaremos las características de los diferentes tipos de queso según la leche, para que puedas descubrir cuál es tu favorito.

Tabla de contenidos

 

¿Cuáles son los quesos según la leche?

Los quesos son una parte esencial de la gastronomía en todo el mundo, y existen numerosas variedades de quesos diferentes. Una de las formas en que se pueden clasificar los quesos es por el tipo de leche utilizada en su producción. Algunos quesos se elaboran con leche de vaca, mientras que otros se elaboran con leche de cabra u oveja. Cada tipo de leche tiene su propio perfil nutricional y sabor, lo que puede influir en el queso resultante.

Los quesos pueden clasificarse según el tipo de leche con el que se han elaborado. Entre los quesos más comunes se encuentran los quesos elaborados con leche de vaca. Estos quesos son los más populares y se encuentran en casi todos los supermercados. Los quesos de leche de vaca se caracterizan por su sabor suave, pero con un toque ligeramente ácido. Entre los quesos elaborados con leche de vaca más conocidos están el gouda, el cheddar, el gorgonzola, el queso azul y el brie.

Otra leche común que se usa para la elaboración de quesos es la de cabra. Esta leche es menos común que la de vaca, pero suele utilizarse para elaborar quesos muy característicos. La leche de cabra se caracteriza por su sabor más intenso, y generalmente los quesos hechos con esta leche son más suaves que los de leche de vaca. Entre los quesos elaborados con leche de cabra más conocidos están el cabra, el feta, el manchego y el queso de cabra curado.

La leche de oveja también se usa para la elaboración de quesos. Esta leche es muy rica en grasa, lo que hace que los quesos hechos con ella sean muy cremosos. Los quesos de leche de oveja tienen un sabor intenso y suelen ser más fuertes que los de leche de vaca. Entre los quesos de leche de oveja más conocidos se encuentran el macho, el idiazábal, el serrano y el roquefort.

Descubre la variedad de quesos según la leche

La leche es el ingrediente principal para la fabricación de quesos. Esto significa que los quesos se pueden clasificar según el tipo de leche con la que están hechos. Así, hay quesos hechos a partir de leche de vaca, cabra, oveja, y una mezcla de estas tres. Conozcamos un poco más a fondo cada uno de estos quesos.

  • Quesos en los que se suele utilizar leche de oveja: El Manchego, un queso español popular y reconocido internacionalmente, está hecho con leche de oveja de la raza manchega. Otros quesos de oveja incluyen el Roquefort, un queso azul francés, y el Pecorino, un queso italiano duro y salado.
  • Quesos en los que se suele utilizar leche de cabra: El Chèvre es un queso de cabra suave y cremoso que se produce en Francia y en otras partes del mundo. Otros quesos de cabra populares incluyen el Crottin de Chavignol, un queso de cabra francés, y el Garrotxa, un queso de cabra español de sabor terroso y notas florales.
  • Quesos en los que se suele utilizar leche de vaca: El Cheddar es un queso británico muy conocido, que puede variar en sabor según el tiempo de maduración. Otros quesos populares de leche de vaca incluyen el Brie y el Camembert, dos quesos franceses suaves y cremosos, y el Parmesano, un queso italiano duro y salado utilizado comúnmente para rallar.
  • Mezcla de leche de vaca, cabra y oveja: Además de los quesos hechos con un solo tipo de leche, también hay algunos quesos hechos con una mezcla de leche de vaca, cabra y oveja. Estos quesos tienen un sabor único y una textura única. Entre los quesos hechos con una mezcla de leche de vaca, cabra y oveja se encuentran el Pecorino Romano, Tomme de Savoie, Fourme d’Ambert y Monte Enebro

¿Cómo conservar los quesos según la leche?

A continuación, te presento algunas pautas generales para conservar diferentes tipos de quesos según su leche:

  • Quesos de leche de vaca: Estos quesos suelen ser más resistentes y pueden durar más tiempo. Para conservarlos, es recomendable envolverlos en papel encerado o papel para alimentos y almacenarlos en el cajón de verduras de la nevera. Si el queso es blando, es mejor consumirlo en los primeros días después de su compra. Los quesos más duros se pueden mantener en buen estado durante varias semanas.
  • Quesos de leche de cabra: Estos quesos suelen ser más delicados y tienen una vida útil más corta que los quesos de leche de vaca. Es importante envolverlos en papel para alimentos y almacenarlos en la parte menos fría de la nevera, como en la puerta o en la estantería superior. Es recomendable consumirlos en los primeros días después de su compra.
  • Quesos de leche de oveja: Estos quesos suelen ser más resistentes y pueden durar más tiempo que los quesos de leche de cabra. Para conservarlos, es recomendable envolverlos en papel para alimentos y almacenarlos en la nevera. Los quesos más duros se pueden mantener en buen estado durante varias semana

En general, los quesos se conservan de manera similar da igual la leche. A continuación, te dejo unos consejos para que puedas mantener el queso el mayor tiempo posible. Trocea el queso en diferentes trozos para que puedas ir empezando las pequeñas porciones de queso cuando lo necesites. Cuando los trozos de queso estén listos para ser conservados, se deben colocar en un recipiente hermético para evitar que se sequen. Esto ayudará a mantener los sabores del queso y evitará que se produzcan bacterias que puedan dañar el queso. Si se desea, se puede agregar algo de sal para aumentar la duración de la vida útil del queso.

Una vez que el queso esté en el recipiente hermético, se debe conservar en un lugar fresco y oscuro. La temperatura adecuada para conservar el queso es entre 4°C y 10°C. Si la temperatura es demasiado alta, el queso se puede descomponer más rápidamente, por lo que no debe ser almacenado en un lugar caluroso.

Por último, el queso se debe consumir antes de la fecha de caducidad. Si el queso se conserva correctamente, se puede durar hasta un mes. Sin embargo, es importante asegurarse de que el queso no se descomponga antes de su consumo.